| Carta
al Director: | |||||
M.
Teresa Sola García Ana Bejines Ramírez Rosa Palomar Fontanet M. Ángeles Sota Mazas Rosa Alonso Nates Camino Villa Llamazares Pedro Morales | Hospital
Universitario Marqués de Valdecilla Santander | |||||
Señora Directora: La Diálisis Peritoneal es una técnica de depuración extrarrenal, que utiliza la propia membrana peritoneal como filtro. El peritoneo es una membrana semipermeable muy vascularizada y selectiva a determinadas sustancias, mediante lo cual se consigue el intercambio de agua y solutos entre la sangre y el líquido peritoneal. El Test de equilibrio Peritoneal (TEP), es una técnica que nos permite conocer las características del peritoneo en cuanto a su permeabilidad y transferencia de creatinina, urea, glucosa. Las aplicaciones del TEP son; clasificar el transporte peritoneal, establecer la dosis y tipo de diálisis mas adecuadas, monitorizar la función peritoneal y diagnosticar daño de la membrana (ultrafiltación inadecuada, aclaramiento de solutos inadecuado…). El TEP se debe realizar entre las 2 y 4 semanas de inicio de tratamiento (basal), ante la sospecha clínica de alteración del trasporte peritoneal. Existe controversia sobre la necesidad de repetirlo después de un episodio de peritonitis, aunque los cambios que se producen en esta situación son en general reversibles. Por lo tanto se aconseja repetir el TEP siempre que se sospeche que hay algún factor, de los enunciados anteriormente que esté alterado, para ajustar mejor la pauta de diálisis en cada situación concreta.
OBJETIVO MATERIAL Y MÉTODO Seleccionamos 9 pacientes (6 varones) en CAPD de forma aleatoria. Se les informó en que consistía la prueba y la finalidad de la misma, también se les pidió su consentimiento para llevar los resultados y las fotografías a algún foro científico (consentimiento informado). Se realizó el
TEP un día a la semana, durante 3 semanas consecutivas, a la misma hora
y en las mismas condiciones. Aplicamos el TEP de 4 horas. RESULTADOS Los pacientes tenían una edad media de 63’6 (48-70) años. Excepto un paciente que llevaba en la técnica 2.520 días, los otros 8 llevaban en esta forma de tratamiento un mínimo de 40 días (media 455’3± 794’8 días). La enfermedad de base era en 1 caso (11%) Diabetes Mellitus, en 3 (33%) Nefroangioesclerosis, en otros 3 (33%) Poliquistosis Renal y en 2, (22%) Glomerulonefritis crónica. En nuestro grupo de estudio 4 (44%) eran transportadores medios (tabla 1). En 3 de los 9 pacientes, el TEP no fue totalmente superponible mientras que si lo fue en los demás (tabla 2).
El
tipo de transporte peritoneal de los paciente estudiados fueron: el 11% (2/9)
Alto Transportador, el 22% (2/9) Medio Alto, el 22% (2/9) Medio Bajo; no hubo
ningún paciente que fuera Bajo Transportador. CONCLUSIONES La mayoría
de los pacientes estudiados entran dentro del tipo de transporte peritoneal que
se considera normal. BIBLIOGRAFÍA 1. Andréu Periz
L, Force Sanmartin E. 500 Cuestiones que plantea el cuidado del Enfermo Renal.
Ed. Masson; 2001. |