Introducción:
La plasmaféresis es una técnica utilizada en el tratamiento
de algunas enfermedades, no sólo la enfermedad
renal y metabólica, también enfermedad autoinmune
y reumática, hematológica y neurológica. En nuestra
unidad se aplica dirigida a todas ellas, no obstante, el
presente estudio se centra en la aplicación a las enfermedades
neurológicas, en concreto, la miastenia gravis.
El recambio plasmático ha demostrado ser una técnica
eficaz con evidencia científica de primer nivel en enfermedades
como el síndrome Guillain-Barré, la polineuropatía
desmielinizante inflamatoria crónica o la miastenia
grave. Esta última consiste en un trastorno de la
transmisión neuromuscular debido a la disminución de
origen autoinmune del número de receptores de acetilcolina
en la placa motora, a causa del anticuerpo 7 S
gammaglobulina (AChR-ab). Comienza generalmente
con afectación de los músculos oculares, como diplopía
o ptosis palpebral, el empeoramiento puede conducir a
fallo respiratorio y amenazar la vida. La plasmaféresis
es el tratamiento de emergencia en esta enfermedad,
es eficaz en pacientes con compromiso respiratorio o
bulbar, disfagia o pérdida de la locomoción, también en
crisis miasténicas y previo a la timectomía.
Objetivos:
El objetivo que nos planteamos es demostrar la utilidad del tratamiento con plasmaféresis en la miastenia gravis a través de una serie de casos estudiados en nuestra unidad.
Material y Método:
Se trata de un estudio observacional descriptivo. Estudiamos
7 pacientes diagnosticados de Miastenia Gravis
y tratados con Plasmaféresis en el periodo comprendido
entre el año 2007 hasta el 2015. Las variables que tuvimos
en cuenta fueron el sexo, edad, número de sesiones,
líquido de reposición, motivo que conduce a la realización
de la técnica, anticoagulación, datos analíticos,
efectos adversos relacionados con la técnica y evolución.
Para analizar los datos se utilizaron los estadísticos descriptivos
y las frecuencias del SPSS.
Resultados:
Se realizaron un total de 53 sesiones en 6 mujeres y 1 hombre. El requerimiento de la técnica fue por crisis miasténica con compromiso respiratorio, precisando intubación orotraqueal, disfagia y debilidad generalizada, insuficiencia respiratoria hipercápnica y debilidad muscular y como tratamiento previo a la timectomía. La técnica fue bien tolerada por los pacientes y se produjo remisión del brote. La evolución fue favorable en el 85,7% de los casos y en sólo el 14,3% restante no hubo mejoría subjetiva.
Conclusiones:
Es fundamental la enfermería nefrológica en este procedimiento que con su manejo y destreza en las técnicas de depuración sanguínea, es capaz de minimizar complicaciones y efectos adversos y contribuir a la mejora de los pacientes afectados por esta enfermedad.